"Grecia es como Andalucía con una historia ancestral, comparte nuestro amor por el aceite de oliva, el vino y la procedencia de su recetaria, clave de nuestra querida dieta Mediterránea", asegura el malagueño Sergio Garrido, chef ejecutivo del Hotel Vincci Posada del Patio, que se encuentra estos días en Atenas, abanderando la gastronomía española en Grecia, dentro de una campaña de la Cámara de Comercio.
Garrido elaborará platos para compartir con los chefs griego, con recetas patrias como rabo de toro o carnes ibéricas, sin olvidar el gazpachuelo, la ensalada malagueña de bacalao y su querida sopa perota, de su pueblo paterno, Álora. "La experiencia es muy emotiva, aunque son una cultura muy de aceite de oliva virgen extra, verduras y sopa, se sorprendían al probar el gazpachuelo, y saber que es tan simple como patata, cebolla, pescado y mayonesa”, explica.
Un viaje para presumir de Málaga, y donde el chef ha aprovechado para visitar, por ejemplo, el mercado local, y sumergirse en los sabores helenos: “Creo que Grecia es junto a Italia el país con el que mas nos podemos parecer, tienen una cultura muy parecida, te acogen como uno más y si te perdieras en cualquier ciudad o pueblo parece que siguen en cualquiera de nuestros rincones de nuestra querida España”, asegura.
Otro reto de altura, que se suma a sus experiencias internacionales, donde el joven malagueño ha vendido nuestra gastronomía con campañas en Asia o Jamaica. Con apenas nueve años se empeñó en darle la vuelta a la tortilla que elaboraba su abuela, haciendo saltar la chispa por la cocina, un amor que se ha hecho desde entonces más grande, y que marca el carácter de este cocinero, uno de los más volcados además en actos solidarios en nuestra provincia, como demuestran las dos organizaciones con las que colabora, Avoi y Mundo Infantil, que llevaba grabadas en su chaquetilla y de las que presume allí donde va.
En su horizonte más cercano, un libro de recetas muy peculiar que verá la luz, espera, el próximo año. "“Será un libro con recetas, pero también con fórmulas matemáticas en las que creo que se basa la vida y en donde no faltarán los cuentos infantiles, para que el cocinero que llega cansado a casa siempre pueda leerle un relato a sus hijos", avanza este admirador de Pedro Subijana, defensar en el Vincci de la cocina con productos locales y que sueña con compartir mesa y mantel con Joaquín Sabina y Eduard Punset.