El alcalde, José Ignacio Landaluce, ha manifestado que uno de los mejores termómetros para medir la recuperación económica en las ciudades son sin duda las licencias urbanísticas para la construcción, remodelación y mejora de viviendas, así como para la apertura de nuevos establecimientos tanto de actividad comercial como administrativa. Y ese índice ha ido creciendo en los dos últimos años.
Así, de enero a agosto de 2016 se han tramitado en Medio Ambiente y Urbanismo un total de 105 licencias, tan solo en lo que se refiere a apertura de locales, y se constata un incremento progresivo y constante respecto a los dos últimos años, en los que se tramitaron un total de 88 licencias (2014) y 99 (2015).
El alcalde recordó que cuando este equipo de gobierno llegó a la alcaldía en 2011, eran muy escasas las solicitudes de licencias, no ya sólo de apertura de nuevos locales, sino de construcción en viviendas, lo que ahora ha repuntado fundamentalmente en lo que se refiere a viviendas unifamiliares; así como también en construcciones de piscinas y ampliaciones y mejoras en inmuebles, que no se acometen cuando hay escasez de recursos porque son actuaciones prescindibles.
Igualmente –señaló- en los últimos años se ha logrado revitalizar la rehabilitación de edificios antiguos como nunca antes se había hecho, y recordó el caso de la Suite de las Cortinas y el de la vivienda colindante, o el de la plaza Juan de Lima conocido como el del Coñac Oxigenado –por citar algunos casos-. Volviendo a la actividad comercial, Landaluce mencionó como dato a destacar que no solamente la reactivación de locales se ha evidenciado en el centro de la ciudad, sino que de las licencias tramitadas, 15 fueron en barriadas de la zona sur y otras 32 en la zona norte.
“El comercio es punta de lanza en la vida económica de las ciudades y un gran generador de empleo, uno de los principales caballos de batalla de este equipo de gobierno, y hoy se puede comprobar como poco a poco se van recuperando locales cerrados y la normalidad vuelve a las calles, y no sólo en el centro, sino en toda la ciudad “, manifestó el alcalde.
Landaluce también se ha referido al gran esfuerzo realizado por el Ayuntamiento en la recuperación de zonas que habían ido perdiendo su vida comercial en los últimos años, como es el caso del Barrio la Caridad, donde se realizan continuas inversiones para su mejora y embellecimiento que se está traduciendo en un retorno de la actividad y en que los ciudadanos vuelvan a transitar por calles que se estaban quedando vacías. “Este es el caso, por ejemplo, de la calle Juan Castelar, donde tras el cierre de Montes y otros locales, próximamente se instalarán otros comercios que contribuirán a que ésta calle tan típica algecireña recupere la vida que tuvo antaño”, explicó.
También se sigue trabajando en el barrio San Isidro, donde ya se han invertido 400.000 euros para la mejora de sus infraestructuras y el embellecimiento de sus calles, contribuyendo a que recupere el tipismo de barrio andaluz y siendo foco de atención de las personas que nos visitan y de nuestros propios ciudadanos.
Las obras siguen su curso, por lo que el alcalde se muestra optimista respecto al presente y un futuro muy cercano, “que se presentaba incierto y que se ha logrado revertir, con escasez de recursos pero con gran esfuerzo, ilusión y tesón. Parecía imposible pero lo estamos consiguiendo”, concluyó el alcalde.