El portero titular del Sevilla le ha dado el sí quiero al club que se lo ha dado todo y ha estampado su firma para renovar hasta junio de 2019, con una cláusula de rescisión que asciende a los 30 millones de euros.
Se trata de la última gran perla sevillista. Un joven portero que con tan sólo 22 años y sin hacer apenas ruido desbancó a Beto de la titularidad para nunca más soltarla, a pesar de algunas dudas que en su día mantuvo el propio técnico Unai Emery y que se reflejó en la final de la Supercopa frente al FC Barcelona.
Rico debutó el 14 de septiembre de 2014 ante el Getafe en el Sánchez-Pizjuán, supliendo a los por entonces lesionados Beto y Barbosa, y desde entonces ha disputado 61 choques. En la 14/15 jugó 37 encuentros, incluida la final de Varsovia y en el presente curso ya suma 24 choques.