La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a dos años de prisión y una multa al hombre acusado de retener contra su voluntad durante horas a dos compatriotas con los que al parecer tenían discrepancias al creer que les habían robado dinero y a quienes también golpearon presuntamente, para lo que fue ayudado de otras dos personas que se encuentran en situación de rebeldía.
El procesado ha mostrado su conformidad en el acto de juicio ante el tribunal de la Sección Tercera con las penas interesadas por el fiscal, que ha rebajado su petición inicial de cinco años de prisión por dos delitos de detención ilegal a un año por cada uno de ellos y ha convertido el delito de lesiones por el que pedía dos años de prisión por una falta de lesiones, sobre la que ha interesado una multa económica.
V.A.C. ha aceptado la petición del fiscal durante la vista, que ha carecido de acusación particular. Por otra parte, los otros dos procesados en esta causa, V.C. y V.C.H., se encuentran en situación de rebeldía y contra ellos pesan sendas órdenes de búsqueda y captura.
V.A.C. y V.C. se encontraban el 18 de diciembre de 2008 en su domicilio ubicado en Roquetas de Mar (Almería) cuando una de las víctimas se personó allí pasadas las 16,00 horas. En este momento, debido "a las diferencias que había entre ellos por creer que había intentado sustraerle dinero", comenzaron supuestamente a golpearle "con un palo y una caña de pescar" al tiempo que le propinaban también puñetazos y cabezazos.
En un momento de la agresión, V.C.H. procedió a llamar a su compañero de piso y también acusado, V.C., para decirle que la víctima estaba en la casa. Entonces, según el fiscal, este les dijo "que lo retuvieran hasta que el llegara", por lo que procedieron "en cumplimiento de lo acordado" a atarle los pies y las manos.
Según remarca el Ministerio Público, le tuvieron "privado de libertad hasta las 23,00 horas" ya que, una vez que llegó V.C al domicilio, acordaron dejarle marchar. La víctima presentó denuncia una hora y media después ante la Policía Local de Roquetas de Mar.
Ese mismo día, según se recoge en escrito, a las 18,00 horas llegó la otra víctima al piso y "como los tres acusados estaban en casa y creyeron que sabía algo de si el otro amigo les había intentado sustraerle dinero y este lo negó", V.C. le golpeó supuestamente con el codo en la boca. A continuación, los tres le habrían atado las manos y lo habrían encerrado "durante al menos una y media privándolo de su libertad deambulatoria".