La delegada de Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha considerado este lunes que no ha habido una "ruptura" en las bases del PP pero sí cierto "malestar" por algunas decisiones que se han tomado en el Gobierno, cosa "comprensible" por otro lado, dado que cuando se gobiernan se toman decisiones "muy difíciles".
En una entrevista en TVE, recogida por Europa Press, ha sido preguntada por si cree que algunas de las últimas decisiones tomadas por el Gobierno del Ejecutivo de Mariano Rajoy puede pasar factura al PP y en un futuro generar la presencia de una nueva formación con todos aquellos que no están de acuerdo con los últimos pasos dados.
"No sé si puede haber en el futuro el nacimiento de un partido", ha reconocido Cifuentes quien, no obstante, no cree "que haya habido una ruptura de las bases del PP con el propio partido" aunque sí "malestar por algunas decisiones, cosa comprensible porque cuando se gobierna se toman decisiones muy difíciles, algunas en contra del programa electoral como la subida de impuestos".
A su juicio, "son decisiones muchas de ellas que hay que tomar porque un gobierno tiene que gobernar para todos, según la situación en la que se encuentra". "Pero no creo que haya una ruptura con la base del partido", ha insistido Cifuentes, señalando que es lo que percibe cuando habla con la militancia.
Sin embargo, ha apuntado que "hay que hacer un esfuerzo importante de pedagogía" de "por qué se está actuando así. "Tenemos que esforzarnos mucho para que esa ruptura con el electorado no se produzca", ha indicado Cifuentes.
Cuestionada sobre las críticas que recibió cuando fue ingresada en un hospital público tras el accidente de moto, la delegada de Gobierno ha señalado que tomó la decisión de "pasar página" y de dedicar todos sus "esfuerzos" en "salir adelante". "Cuando hay personas que mantienen esas actitudes el problema lo tienen con ellas mismas", ha dicho.
También se ha mostrado abierta a reformar la Constitución siempre que sea para "racionalizar las competencias que se han transferido, reducir la duplicidad" y en definitiva, conseguir una "gestión más eficiente" pero "no para hacer una ruptura ni mucho menos de manera unilateral del concepto de nación y la historia compartida de tantísimos años que conforman todas las comunidades que la integran".
Esto, "más que una amenaza", ha dicho, sería "un atentado al corazón de nuestra democracia". "España es una gran nación, tenemos una historia común con grandes cosas y azañas y situaciones que se han vivido y no debe ser roto de manera unilateral por un número de personas", ha añadido Cifuentes.
