El proyecto recoge formación específica de dos módulos (de 12 alumnos cada uno) relacionados con el mundo del vino, uno de ellos sobre la viticultura y el otro de elaborador de vinos. Y es que las técnicas de la viña han ido evolucionando y se precisa de personal más formado y cualificado, y ya no basta con la enseñanza por experiencia sino que hay que estudiar y formarse en todo lo que supone el viñedo.
Los 24 alumnos recibirán durante los dos años el 75 por ciento del Sueldo Mínimo Interprofesional (SMI). Las clases teóricas y las prácticas se desarrollarán en la Cooperativa (Unión de Viticultores Chiclaneros), gracias a un convenio que ya se firmó con anterioridad entre Ayuntamiento y los representantes de este colectivo. El equipo docente estará conformado por tres técnicos, un licenciado en Pedagogía y otro en Enología, y un Ingeniero Técnico Agrícola. Además, contará con un auxiliar administrativo.
Mejora de la formación
La iniciativa se encuentra dentro de las medidas que se están llevando cabo en la ciudad para, por un lado, generar puestos de trabajo y, por otro, para ofrecer formación específica que pueda comportar en el futuro un empleo. Dentro del segundo apartado, se encuentra la próxima puesta en funcionamiento del PIE (Proyecto Integral de Empleo), que en los dos próximos años formará a cerca de 90 mujeres.
Durante el acto de presentación de la escuela taller, José María Román lamentó la reducción en la superficie de cultivo de la vid de 4.000 a 400 hectáreas en los últimos años, aunque aclaró que “este sector sigue teniendo un gran futuro y, por ello, estamos obligados a trabajar para su desarrollo y explotación”.