El PP había presentado en la mañana de ayer una querella criminal por prevaricación contra Garzón “al no haberse producido la inhibición solicitada por el fiscal el pasado miércoles y haber incurrido con esta actitud en una reiterada conducta manifiestamente injusta a sabiendas”.
Este delito está penado con una inhabilitación especial para empleo o cargo público durante un periodo de diez a veinte años.
Sin embargo, ante las filtraciones sobre los nombres de los aforados del PP y ante el hecho de que Garzón haya desmentido que González Pons sea uno de ellos y no lo haya hecho en el caso de Bárcenas, el partido ha decidido ampliar esa querella ya que considera que el juez no está respetando el secreto del sumario.
“Rompe descaradamente y de nuevo el secreto del sumario –explica el PP en un comunicado– al desmentir expresamente al diario ‘El País’ a través de un portavoz que el diputado Pons sea uno de los imputados, confirmando que son o pueden serlo los aforados citados en esa y otras informaciones”.
Con esta actitud, el PP considera que Garzón sitúa al partido “en absoluta indefensión”, lo mismo que cree que le ocurre a la Comunidad de Madrid (al negarle el derecho a personarse en el sumario) y a los aforados.