El Ángel Ximénez no dio opción a la selección nacional de Chile y acabó adjudicándose en la noche del pasado miércoles la undécima edición del memorial que lleva el nombre del añorado jugador pontanés, tras vencer al combinado sudamericano por 35-31, un marcador que, aunque se estrechó al final, pudo ser más amplio dada la superioridad mostrada por los pontanenses, que no acusaron la inactividad del periodo invernal.
Los de Puente Genil comenzaron el partido muy seguros en ataque, ofreciendo ritmo y velocidad en la circulación de balón, lo que permitía ganar fácilmente situaciones de superioridad con cómodos lanzamientos en seis metros, ante los que poco o nada podía hacer el portero visitante.
Además, conforme avanzaba el partido, la defensa local comenzaba a ofrecer buenas sensaciones, lo que permitía robar el balón y salir al contraataque. Esta circunstancia, unida al férreo marcaje sobre los lanzadores chilenos, propició que poco a poco el Ángel Ximénez fuera abriendo tierra de por medio en el electrónico hasta conseguir una máxima ventaja de ocho goles (20-12), con la que se llegó al término de los primeros treinta minutos.
Tras la reanudación el encuentro siguió por los mismos derroteros de la primera parte, destacando el acierto del pivote malagueño Miguel Ángel Olea, que suplió a la perfección la ausencia de Felipe Santiago. La diferencia llegó a estar en torno a los diez goles favorables para el Ángel Ximénez, si bien fue ahí cuando apareció el central chileno Emil Feutchmann para asumir la responsabilidad en ataque y conseguir que la diferencia no fuese tan amplia.