La sala 217 de lo penal del tribunal de Primera Instancia de Berlín-Tiergarten dictó la sentencia solicitada por la Fiscalía y destacó que el acuchillamiento del fallecido con resultado de muerte fue un “típico asesinato” motivado por los celos, y “no un accidente”, como había argumentado la defensa.
Los abogados del condenado, un electricista de 47 años que trabaja en la filial madrileña de una multinacional alemana, tienen una semana para apelar a partir de la publicación por escrito de la sentencia, que se prevé para la próxima semana.
El juzgado berlinés consideró probado que en la noche del 5 de noviembre de 2010 Martínez clavó dos veces un cuchillo de cocina a su víctima.