El alcalde de Cádiz, Bruno García, ha informado que el Ayuntamiento ha solicitado a la Junta de Andalucía la anulación de 66 licencias de viviendas con fines turísticos de las 112 que se han registrado durante el primer semestre de 2024.
Estas, según el primer edil, estarían fuera del ordenamiento urbanístico, y se sumarían a las 222 correspondientes al año pasado que cursaron baja.
Bruno García ha insistido en que “estamos encima” de esta actividad para su control y el coordinador del Área de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Cossi, ha avanzado de que “trabajamos” con la Administración autonómica “para la revisión del proceso”.
Actualmente, el titular del inmueble se limita a firmar una declaración responsable que garantiza que cumple los requisitos. La intención del Ayuntamiento es que se establezca el requisito que marca las ordenanzas en este paso para que no se autorice provisionalmente de forma automática.
Asimismo, ha asegurado que se estudian fórmulas para poner coto a la actividad ilegal y ha recordado que las propias comunidades de vecinos pueden evitar la instalación de pisos turísticos de acuerdo a la normativa vigente.
El alcalde ha reiterado la intención del equipo de Gobierno de estudiar cuantas alternativas existan para llevar a cabo una política más restrictiva para frenar la proliferación de este tipo de inmuebles.