Las empresas de proveedores de contenido pornográfico ven estos nuevos aparatos, con el iPad y los teléfonos inteligentes a la cabeza, como una oportunidad comercial para abrir nuevas vías de negocio al potenciar la privacidad en el consumo.
“Hemos bajado los precios para los dispositivos móviles frente a los ordenadores personales”, afirmó Allison Vivas, presidenta de Pink Visual, compañía audiovisual especializada en pornografía.
Durante la Feria de Entretenimiento Adulto de Las Vegas la pasada semana, Vivas explicó que Pink Visual quiere hacer que sus contenidos sean “más accesibles” y puedan verse en cualquier aparato.
Los padres se muestran menos entusiasmados al considerar estos aparatos móviles como una amenaza ya que facilitan el acceso incontrolado de sus hijos a contenidos prohibidos para su edad.
Abundan en internet páginas en las que se solicitan y se ofrecen consejos y pistas para establecer controles.