Hasta ocho efectivos se desplazaron a la calle Ruiz Tagle para atender a una llamada de emergencia realizada desde el número 26.
En ese inmueble, una de las viviendas se encontraba llena de humo después de que los ocupantes de la misma se acostaran sin que reparar en que tenían comida puesta en el fuego. Afortunadamente, ninguna de las personas que vivían en el inmueble tuvo que ser atendida por inhalación de humos.
Aún así, la intervención de los bomberos se limitó a airear la vivienda, para lo que hicieron uso de sus equipos de respiración autónoma.
Hasta el lugar también se desplazaron tres vehículos: una P-19 urbana ligera, U-38 urbana pesada, S-12 vehículos de rescate.