La Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) ha pedido más ayuda humanitaria para las víctimas del terremoto de Siria y Turquía, ocurrido el pasado 6 de febrero pero cuyo "incalculable impacto" aún se sigue notando a pesar de los esfuerzos.
"Hemos visto una resiliencia asombrosa en las comunidades, pero la gente aún se encuentra atrapada en una situación muy difícil. Muchas personas en Turquía, particularmente aquellas que perdieron sus hogares e ingresos, todavía luchan con sus necesidades diarias, incluido el pago de alimentos, alquiler y otras necesidades", ha declarado el jefe de la delegación de la FICR, Rubén Cano.
"Una vida 'normal' sigue estando lejos de llegar. Muchas personas están cayendo en deudas cada vez más profundas para cubrir sus necesidades mientras se recuperan y reconstruyen sus fuentes de ingresos", ha añadido Cano.
Y es que, según un comunicado de la organización, más del 50 por ciento de las familias apoyadas por FICR y por la Media Luna Turca están aumentando sus deudas tras los terremotos en medio de grandes incrementos de precios.
La situación es peor en Siria, pues los doce años de conflicto han complicado aún más la recuperación de los territorios afectados y donde la situación económica sigue empujando a las comunidades más vulnerables hacia la incertidumbre y la dificultad.
"La fase de rescate de la respuesta al terremoto puede haber concluido, pero la situación de emergencia persiste", ha manifestado el jefe de la delegación de la FICR en Siria, Mads Brinch Hansen.
"Se necesita apoyo internacional inmediato en este momento, tanto para satisfacer las necesidades humanitarias inmediatas como para desarrollar la resiliencia de las personas y rehabilitar la infraestructura vital y los servicios comunitarios, que están al borde del colapso", ha agregado Hansen.
La organización ha informado de que sus equipos han brindado ayuda a las comunidades más afectadas a través de alimentos, agua, refugio, atención médica y apoyo psicológico gracias al apoyo financiero tanto de efectivo como de cupones.
Sin embargo, las dos solicitudes de emergencia realizadas por la FICR, en las que se pedían un total de 500 millones de francos suizos (unos 522 millones de euros), tienen un déficit de financiación del 74 por ciento para Turquía y del 57 por ciento para Siria.
"Se necesita urgentemente más apoyo y financiación para tener un impacto significativo en las vidas de las personas afectadas y empoderar a las personas para que reconstruyan sus vidas y contribuyan a sus economías locales tanto en Siria como en Turquía a largo plazo", ha concluido la FICR.