Los más de dos millones de trabajadores del sector público alemán recibirán pagas especiales libres de impuestos hasta febrero de 2024 para compensar la inflación y a partir de marzo un aumento salarial del 5,5 por ciento que, en ningún caso, podrá ser inferior a los 200 euros mensuales.
Así se desprende del acuerdo alcanzado en la noche del sábado entre los sindicatos y la patronal después de largas negociaciones, atravesadas por huelgas de advertencia, que hizo necesario recurrir a un arbitraje.
Cada trabajador deberá recibir en junio de este año una paga especial de 1.240 euros y en los meses siguientes, hasta febrero de 2024, una paga adicional de 220 euros mensuales. A partir de marzo empezará a regir el aumento del 5,5 por ciento El acuerdo sigue en gran parte las sugerencias de la comisión de arbitraje y tendrá una vigencia de dos años.
La ministra de Interior, Nancy Faeser, dijo que la patronal había llegado hasta donde era posible ante la difícil situación presupuestaria.
El presidente del sindicato ver.di, Frank Wernecke, recordó que las negociaciones no habían sido fáciles y señaló que la representación de los trabajadores habían cedido hasta el límite de lo aceptable.
El acuerdo representa un reto ante todo para los municipios, que tendrán costes adicionales que se han cifrado en los 17.000 millones de euros, y a la vez conjura el peligro de una huelga indefinida en el sector público.