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Sevilla

El Real Alcázar licita la restauración del Estanque de Mercurio por casi 300.000 euros

El estanque data del siglo XVI y "constituye uno de los elementos popularmente más reconocidos de este recinto palaciego"

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  • Real Alcázar. -

El Ayuntamiento de Sevilla, a través del Real Alcázar, ha sacado ya a licitación las obras de conservación y restauración del estanque de Mercurio con un presupuesto de 291.291 euros, un estanque que data del siglo XVI y que "constituye uno de los elementos popularmente más reconocidos de este recinto palaciego".

Así lo ha trasladado el Consistorio en un comunicado, donde ha apuntado que el diseño técnico de esta nueva intervención patrimonial en los jardines del monumento trata de recuperar en lo posible la imagen original de este espacio, incluyendo el sistema hidráulico con la totalidad de los surtidores, cuyo correcto funcionamiento se ha ido perdiendo con el paso del tiempo.

Para ello, se ha partido de una investigación multidisciplinar para conocer en profundidad los múltiples elementos pétreos, arquitectónicos y artísticos que conforman el estanque y el comportamiento medioambiental --agua, avifauna--.

"El resultado es una intervención patrimonial adaptada a las características materiales y estéticas del estanque y a los requisitos necesarios para su conservación. Se trata de una de las principales actuaciones que afronta actualmente el Real Alcázar no sólo por la importancia histórica y artística de este espacio, sino también por su valor simbólico como una de las imágenes más conocidas del monumento. Una prueba más del compromiso municipal con el patrimonio de la ciudad, que está recibiendo más inversión municipal que nunca para su recuperación, rehabilitación y puesta en valor", ha destacado la delegada de Presidencia y Hacienda, Sonia Gaya.

En concreto, se abordará una intervención patrimonial integral que permitirá recuperar el sistema hidráulico y los surtidores de agua que rodean el estanque, para lo que se ejecutará el correspondiente circuito de tuberías, proteger el pavimento circundante y los pilares de mármol de la balaustrada; limpiar el interior del estanque, vaciando el mismo previa salvaguarda y traslado de los peces y eliminando la biocostra, la película de carbonatación y la suciedad en general.

Asimismo, también se propone consolidar todos los materiales; proceder a reintegraciones volumétricas; limpiar la balaustrada, retirando los restos de pintura al objeto de encontrar la pintura original, la película de carbonatación y la corrosión y realizando posteriormente la inhibición del hierro y corrección de las deformaciones en sus pletinas, con las reintegraciones volumétricas que sean necesarias; proteger la balaustrada y sus remates decorativos; limpiar con métodos químicos y mecánicos las característica bolas y protegerlas con cera microcristalina; y limpiar, inhibir y proteger los leones de bronce de las esquinas.

Estos trabajos también atañen al pedestal y pilar central del estanque. En el vaso se procederá a la limpieza y el tratamiento de los caños cerámicos, fijando la superficie vítrea de las piezas cerámicas (alizares).

Se procederá, por último, a un análisis pormenorizado de los materiales que componen el grupo escultórico renacentista del surtidor (es decir, la escultura del dios Mercurio) para una posterior intervención patrimonial específica. Una vez que culminen estas labores, se procederá al llenado y la repoblación del estanque.

"En la medida de lo posible, vamos a tratar de acercar el Estanque de Mercurio a la imagen primigenia que debió tener. Este es un claro ejemplo de la rigurosa intervención patrimonial y constante inversión que se despliega en el Real Alcázar de Sevilla, partiendo de una labor previa de investigación que, además, nos aporta nuevos conocimientos científicos e históricos", según ha concluido Sonia Gaya.

El Estanque de Mercurio era la antigua alberca que recogía las aguas procedentes del acueducto romano, reutilizado por los musulmanes, conocido como los 'Caños de Carmona', que regaba las huertas y jardines del Real Alcázar. A partir de 1575 se transformó en estanque y se corona con una escultura renacentista en bronce del dios Mercurio, realizada por Diego Pesquera y fundida por Bartolomé Morel. Este mismo artista fundió las rejas, las bolas y los leones que rodean el estanque.

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