El Gobierno español ha asegurado que "en ningún momento" ha solicitado una intervención de la OTAN en Malí, en respuesta a la convocatoria del embajador español por las autoridades de Bamako para pedir aclaraciones a unas palabras del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, sobre la realidad del flanco sur de la Alianza Atlántica en el continente africano.
El ministro de Exteriores maliense, Abdoulaye Diop, anunció a última hora de ayer la convocatoria del diplomático español, José Hornero Gómez, sobre los comentarios formulados por Albares durante la cumbre de Madrid, en relación a las posibilidades de la capacidad operativa del flanco sur de la OTAN ante la amenaza del yihadismo en el Sahel o la expansión de la presencia rusa.
El ministro de Exteriores maliense, Abdoulaye Diop, entendió estos comentarios como una posible amenaza a la integridad y a la soberanía de Malí, donde la comunidad occidental sospecha que mercenarios rusos del grupo Wagner auxilian a la actual junta militar que gobierna el país.
En respuesta, el embajador español ha asegurado en nombre del Ministerio de Exteriores a las autoridades malienses que "España no ha solicitado ni durante la cumbre ni en ningún otro momento, ninguna intervención, misión o algún tipo de actuación en Malí de la Alianza", aseguran fuentes de Exteriores a Europa Press.
Durante su encuentro, el embajador aprovechó para "reafirmar los profundos lazos de amistad y cooperación y amistad con Malí", así como su compromiso para "continuar impulsando relaciones pacíficas y amistosas con Malí".