Los centros educativos de la provincia han recibido este lunes a los alumnos tras las vacaciones de Navidad en plena sexta ola de la pandemia del coronavirus. Lo han hecho con normalidad, según ha asegurado la delegada territorial de Educación de la Junta de Andalucía, Estela Villalba, y sin que se haya producido, al menos de momento, “ninguna situación crítica” por falta de personal en ninguno de los centros.
Según ha explicado Villalba a Viva Huelva, en los primeros cuatro días hábiles de enero se registraron siete, cinco, tres y dos bajas entre los docentes. El porcentaje de ausencias, analiza, “no es significativo” si se tiene en cuenta que la plantilla de profesores y maestros de la provincia es de casi 7.500 personas.
Según los datos facilitados por la Junta, a las 15.00 horas de este lunes el número de solicitudes de sustitución - incluyendo todas las bajas, por cualquier motivo- era de 60, lo que representa el 0,80% de la plantilla de la red pública, integrada por 1.481 maestros y profesores. Se trata de siete peticiones de sustitución más que en la misma fecha del año pasado.
En cualquier caso, Villalba advierte que la Junta es consciente de que esta situación podría empeorar en cualquier momento y, por ello, mantiene un dispositivo de alerta para conocer de forma inmediata las bajas que se produzcan en cada centro, para poder adoptar las medidas oportunas con urgencia. Esta monitorización permanente de los centros por parte de la Delegación, explica Villalba, se mantendrá al menos “diez o quince días más”, mientras lo imponga la incidencia de la pandemia.
Si fuera necesario, advierte Villalba, se recurriría a realizar contrataciones urgentes a través de llamamientos por teléfono, al margen del sistema SIPRI.
En cualquier caso, aclara Villalba, este sistema se aplicaría solo “en casos excepcionales” en los que un elevado porcentaje de bajas docentes pusiese en riesgo la atención del alumnado. “El llamamiento telefónico no es la opción uno”, aclara Villalba, sino un recurso de excepción en aquellas situaciones en las que esperar a las contrataciones de SIPRI, que son las que garantizan realmente la transparencia del proceso, no sea viable.
El número de bajas que tiene que acumular un centro para que se active este llamamiento urgente no es fijo. “Depende del tamaño del centro porque no es lo mismo tener cinco bajas en un claustro de 20 docentes que en uno de cien”, afirma la delegada.
Por el momento, ninguno de los 494 centros públicos ha requerido la aplicación del procedimiento urgente de contratación ya que los directores han considerado que podían asegurar el servicio educativo con los medios de los que disponen. Desde la Delegación explican que “solo hay dos centros que podrían considerar medidas de urgencia” este martes y que están siendo monitorizados “para atenderlos de urgencia si es preciso”.
Asimismo, la delegada destaca que tienen “todos los escenarios posibles preparados” para garantizar que los centros educativos onubenses sean espacios seguros, como lo han sido hasta ahora.
En este sentido, Villalba explica que las medidas preventivas que se aplican en los centros “ya han demostrado su eficacia” y que los protocolos han ido mejorando en todos estos meses con avances como el hecho de que la coordinación covid recaiga en los equipos directivos, algo que “ha agilizado mucho la comunicación con los enfermeros de enlace”. El sistema de intervención, afirma, “está mucho más rodado” y es “un éxito colectivo” de toda la comunidad educativa.
Críticas sindicales
El balance oficial de la vuelta al cole tras las vacaciones de Navidad contrasta con el realizado por algunos sindicatos docentes, como CSIF, que ha rechazado la “normalidad” defendida por la Junta.
“No se puede hablar de normalidad cuando las bajas de docentes prácticamente duplican el porcentaje medio que se produce normalmente y cuando los centros arrancan el trimestre entre la desinformación y la incertidumbre, ya que no cuentan con una comunicación oficial de las modificaciones en cuanto a las cuarentenas del alumnado”, sostienen desde el sector de Educación del sindicato.
Desde CSIF afirman que el porcentaje de bajas registrado en los centros de la provincia es de un 7,5%, “casi el doble de la que se registra habitualmente, que suele ser de un 4% aproximadamente”.
Por su parte, UGT ha criticado “la clara falta de previsión por parte de la administración educativa” y ha exigido un “sistema para cubrir las bajas” de forma ágil.